Nombre científico: Dyscophus antongilii
Anuro terrestre robusto que habita zonas húmedas de bosques y áreas alteradas cercanas al agua.
Cómo es Rana tomate de Madagascar en su entorno natural, con el clima, refugios y recursos que necesita.
La rana tomate de Madagascar es un anfibio llamativo que ayuda a poner el foco en la singular biodiversidad malgache.
Ocupaba originalmente bosques húmedos, pero hoy también se observa en áreas alteradas siempre que haya charcas y refugios.
Pasa gran parte del tiempo en el suelo, escondida entre hojas y raíces, saliendo al atardecer a alimentarse.
Su piel segrega sustancias pegajosas e irritantes que actúan como defensa frente a algunos depredadores.
Está amenazada por la destrucción de hábitat y la colecta excesiva; la protección de zonas clave es prioritaria.
Detalles llamativos sobre Rana tomate de Madagascar que ayudan a comprender mejor su biología y su papel en los ecosistemas.
Resumen de los puntos más críticos si Rana tomate de Madagascar se mantiene en cautividad en centros especializados.
En cautividad requiere terrarios terrestres amplios con sustrato húmedo y refugios.
Necesita una zona acuática o recipientes de agua limpios para hidratarse y, eventualmente, reproducirse.
Tolera mejor la observación que otras ranas más nerviosas, pero aun así debe minimizarse el manejo.
Información general pensada para instalaciones profesionales y proyectos educativos. No pretende fomentar la captura ni la tenencia improvisada de anfibios silvestres.
Puede mantenerse en instalaciones especializadas con criterios responsables, evitando la extracción de ejemplares salvajes.
La dieta se compone de insectos variados y ocasionalmente otros invertebrados de tamaño adecuado.
Es útil ofrecer escondites múltiples para reducir la exposición continua al público.
Como otras especies de Madagascar, su historia sirve para hablar de la fragilidad de los ecosistemas insulares.
Esta sección tiene un propósito educativo. La conservación de los anfibios pasa, sobre todo, por proteger charcas, ríos, bosques y humedales, y por evitar la liberación irresponsable de especies exóticas.